La micropigmentación es una técnica de maquillaje permanente que consiste en insertar en la epidermis (la capa más superficial de la piel) pigmento mediante pequeñas agujas y cuyo fin es el de embellecer, corregir o mejorar determinados rasgos faciales.
Con esta técnica, también conocida como maquillaje permanente, se consigue tanto resaltar los rasgos faciales de una persona como corregir y embellecer la expresión del rostro, dependiendo de dónde se aplique.
La principal ventaja de la micropigmentación es que se va perdiendo de forma paulatina, permitiendo así adaptarse a los cambios en la fisionomía del rostro con el paso del tiempo y dejando un efecto más natural. En el caso, por ejemplo, de las cejas, a medida que la forma de nuestro rostro envejece, se alarga o redondea o aparecen arrugas en el contorno de ojos, la forma de nuestras cejas cambia y si el pigmento fuera permanente no iría acorde a la nueva forma.
Por tanto, la duración de éstos en la piel varía en función de cada persona y tipo de piel.
Cejas
La micropigmentación en cejas está muy solicitada para casos en los que hay falta o escasez de pelo por diferentes motivos ya sean genéticos o de salud, tales como tratamientos de quimioterapia o simplemente cicatrices en la zona que han motivado la caída de pelo.
Ojos
Existen varias opciones en cuanto a la micropigmentación en los ojos.
Relleno de pestañas: En este caso, se introduce el pigmento natural justo en la raíz de las pestañas tanto en la parte superior como inferior. El resultado que se consigue es que aporta profundidad a la mirada y volumen en las pestañas.
Eyeliner-línea del ojo: Para dibujar la línea del ojo se trabaja con diferentes grosores en función de la forma de los ojos, los gustos de la persona, etc. El efecto que resulta de la micropigmentación es igual que cuando nos pintamos con un lápiz, con la diferencia de que la línea se mantiene perfecta
Labios
Si hace unos años, lo más demandado era aplicar la micropigmentación en el perfil de los labios para corregir alteraciones de la línea, cicatrices o por estética, hoy día se trabaja junto al relleno de la mucosa labial, lo que permite un efecto aún más natural.
En el caso de los labios, se puede elegir entre una amplia gama de colores, en función de los gustos, y el perfil puede ir más o menos degradado para un resultado totalmente natural.