Como profesionales de la cosmetología debemos saber cuál es el objetivo de la limpieza facial ya que este tratamiento es el que nos permite:
– El primer acercamiento para conocer el biotipo cutáneo.
– Liberar la piel de sebo acumulado, contaminantes, toxinas, maquillaje y todo aquello que se acumula en la piel durante su exposición a la intemperie.
– Que los activos de tratamientos posteriores penetren a mayor profundidad.
– Ofrecer a nuestros clientes un tratamiento seguro con resultados desde la primera sesión.
Debido a esto, identificamos 3 etapas importantes en el protocolo de limpieza facial hecho por un profesional de la cosmetología:
Limpieza superficial
Limpieza superficial. Ésta etapa consiste en:
Desmaquillar a través de la aplicación de un shampoo, leche, gel o espuma que se distribuyen en el rostro con maniobras específicas para atrapar el sebo acumulado y retirarlo de la superficie de la piel.
Arrastre se aplica una loción o tónico para terminar de retirar los residuos de desmaquillante y equilibrar el ph de la piel después de la aplicación de un limpiador.
Exfoliar mediante la aplicación de un exfoliante mecánico o químico para adelgazar el estrato córneo.
Limpieza profunda
Limpieza profunda de poros, extraemos los comedones, puntos negros.
Aplicamos un producto desincrustante que ayudará a suavizar el sebo y facilitar la extracción.
En caso de que uses vapor y ozono, puedes aplicarlo durante 10 minutos máximo a una distancia de 25 cms del rostro.
Extracción manual mediante tus manos, sacacomedón o ventosas.
Aplicar alta frecuencia para cerrar el poro, desinfectar, cicatrizar y oxigenar
Aplicación de mascarilla según el tipo de piel que estemos tratando.
Limpieza facial profunda con puta de diamante.
La microdermoabrasión con punta de diamante, ha logrado posicionarse como uno de los mejores tratamientos de limpieza para el rostro en los centros de estética.
Tanto hombres como mujeres sienten que es la mejor opción para eliminar las células muertas y proyectar una piel rejuvenecida, suave e hidratada.
¿Qué es el facial con puntas de diamantes?
La limpieza facial profunda con puntas de diamante es un tratamiento no invasivo que realiza una microdermoabrasión usando distintos niveles de intensidad para exfoliar la piel.
También conocido como exfoliación mecánica, la limpieza facial profunda con punta de diamante busca extraer las células muertas con una máquina, sin ocasionar dolor o agredir la piel del rostro. Además de ir puliendo de forma gradual toda las capas y estimular la producción de colágeno que es el objetivo principal.
El procedimiento es indoloro, y es posible aplicar la punta de diamante en casi todo tipo de pieles; incluso aquellas que tienen alto grado de sensibilidad.
Sellado del tratamiento
Ya que hemos retirado exceso de sebo, contaminación, maquillaje … y que la piel ha pasado por una serie de pasos que han alterado su composición es importante devolverle de forma artificial aquello que la protegerá mientras regenera su manto hidrolipídico.
Aplicar un tónico equilibrante de ph mediante tecleteo.
Aplicar una crema, gel o fluido según el biotipo cutáneo procurando que sea un producto humectante que devuelva a la piel grasa y la ayude a mantener la humedad necesaria para su correcto funcionamiento.
Aplicar protector solar.
Como esteticista seguir paso a paso el protocolo de limpieza facial profunda es vital para obtener resultados positivos en la piel de nuestros clientes.