¿En que consisten?

Los hilos líquidos, también conocido como hilo líquido estético, es un tratamiento no quirúrgico cuyo principal objetivo es reducir los signos de la edad gracias a la introducción de un reafirmante dérmico en las partes de la cara más afectadas por el envejecimiento. De esta manera, se pretende recuperar el contorno y la forma natural del rostro.

Sus resultados sirven para:

-Mejorar la simetría

-Definir la mandíbula y el cuello

-Corregir la papada

-Minimizar las líneas de expresión

¿Cómo se aplican?

Después de un estudio minucioso llevado a cabo por una especialista en estética donde tanto ella como el paciente hablan sobre los resultados que se pretenden conseguir, se señalan las secciones del cutis donde se quiere infiltrar el concentrado reafirmante. Este tratamiento se realiza con la técnica de hyaluropen.

El concentrado liquido que se infiltra consigue la restauración de proteínas estructurales y proteoglicanos en la dermis. La solución combina las sustancias activa que regulan la síntesis de colágeno de tipo I y elastina. Elevando el tono de los músculos faciales, mejorando la elasticidad y firmeza.

Duración

El efecto tensor de los hilos líquidos perdura durante aproximadamente 2 y 4 meses. Es cierto que este salto en el tiempo depende de la edad del paciente, el estado de su piel y el cuidado que lleve a cabo después del tratamiento.

Recomendación

Hacer entre 3 ó 4 sesiones cada 6 meses. Todo ello dependiendo del estado de la piel.

Es muy recomendable para un mejor resultado el utilizar una mentonera después del tratamiento unas horas al día durante varios días.